El renminnbi está en el top 10 de las monedas globales más fuertes del mundo. En medio de las sanciones occidentales impuestas contra Rusia tras la invasión de Ucrania, prestamistas chinos han intervenido para conceder miles de millones de dólares a bancos rusos.
Según un estudio de la Escuela de Economía de Kiev publicado en Financial Times, la exposición de China al sector bancario ruso se cuadruplicó en los 14 meses hasta finales de marzo de este año. Mientras instituciones financieras de Occidente se han retirado de Rusia debido a presiones políticas y regulatorias, cuatro de los bancos más grandes de China han ocupado su lugar. Este es un esfuerzo más en el ambicioso proyecto de Beijing para promocionar su moneda, el renminbi, como una alternativa global al dólar estadounidense.
El renminbi es el nuevo zar
«Los préstamos de los bancos chinos a los bancos e instituciones de crédito rusos, que en su mayor parte son casos en los que el yuan [otro nombre para el renminbi] reemplaza a los dólares y euros, demuestran que las sanciones están haciendo su trabajo», dice Andrii Onopriienko, subdirector de desarrollo de la Escuela de Economía de Kiev. En este sentido, el desplazamiento del dólar y el euro por el renminbi en las transacciones financieras internacionales es un desarrollo que Beijing ha estado fomentando de manera proactiva durante la última década.
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De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la moneda china se ha elevado al sexto lugar en las reservas de divisas globales, por detrás del dólar estadounidense, el euro, el yen japonés, la libra esterlina y el dólar canadiense. Aunque aún está lejos de desbancar al dólar como la moneda global dominante, su participación en las transacciones internacionales ha crecido de manera constante. La adopción del Sistema de Pagos Internacionales en Renminbi (CIPS), por sus siglas en inglés), y la expansión de la Iniciativa del Cinturón y Ruta de la Seda, han creado más canales para el uso del renminbi en las transacciones globales.
Actuaciones deliberadas
Robert Kaplan, ex presidente del Banco de la Reserva Federal de Dallas, señaló en una conferencia reciente que «China está construyendo deliberadamente infraestructuras financieras globales para respaldar su moneda, y lo que estamos viendo en Rusia es un ejemplo muy real de cómo se podría lograr ese cambio en el equilibrio de poder financiero global».
Los acuerdos bilaterales con otros países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y naciones de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) también han contribuido a la internacionalización del renminbi. Según datos de la Cámara de Comercio Internacional, el volumen de comercio en renminbi entre China y otros países BRICS aumentó en un 35% en 2022 en comparación con el año anterior. La firma de acuerdos de swap de moneda con más de 30 bancos centrales en todo el mundo también apunta hacia la misma dirección.
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Este asunto tiene un pasado
En el plano histórico, la ascensión del renminbi es una reminiscencia de cómo el dólar estadounidense reemplazó a la libra esterlina como la moneda dominante del mundo después de la Segunda Guerra Mundial. «En periodos de crisis y transición geopolítica, las monedas pueden ganar o perder estatus muy rápidamente», afirma la Dra. Emily Erikson, historiadora económica de la Universidad de Yale. «Lo que estamos viendo con el renminbi es parte de un cambio más grande en la dinámica del poder global».
Los movimientos de Beijing hacia la internacionalización del renminbi, evidenciados en la reciente cooperación financiera con Rusia, representan una ambiciosa estrategia para reposicionar su moneda en el escenario global. Aunque lejos de eclipsar la dominación del dólar estadounidense en el corto plazo, el renminbi está ganando terreno de manera sostenida, y su creciente presencia podría reconfigurar el equilibrio del poder financiero global en las próximas décadas.