No olviden el nombre: Ángel Correa. Desde que Lionel Messi se convirtió en el estandarte del fútbol mundial, su magia en el campo y su legado en el Barcelona, así como en la selección argentina, han dejado una sombra gigantesca bajo la cual muchos jóvenes talentos han tratado de desarrollarse.
Aunque nombres como Paulo Dybala o Lautaro Martínez suenan como posibles sucesores, hay uno que ha venido ganando terreno y captando la atención del mundo del fútbol: Ángel Correa. Rosarino, como Messi, comenzó a dar destellos de su calidad en San Lorenzo de Almagro, donde sus habilidades técnicas y visión de juego llamaron rápidamente la atención. Fue esta habilidad innata la que le llevó a cruzar el océano y aterrizar en el Atlético de Madrid, donde bajo la tutela de Diego Simeone, ha pulido sus habilidades y se ha transformado en una pieza clave del equipo colchonero.
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Ángel Correa bajo la lupa
Según el análisis de la prestigiosa revista FourFourTwo, Ángel Correa combina una agilidad similar a la de Messi con una resistencia física notable, lo que le permite destacar tanto en los partidos de alta intensidad de la Liga Española como en las exigentes contiendas de la UEFA Champions League. Su capacidad de romper líneas defensivas, ya sea con un regate o con un pase incisivo, evoca reminiscencias de un joven Messi haciendo sus primeras apariciones en el Camp Nou.
Además, el Instituto de Estadística del Fútbol (IESF) señala que Correa ha sido fundamental en más del 30% de los goles que el Atlético de Madrid ha anotado en las últimas dos temporadas, ya sea como autor directo o asistente. Estos números lo ponen a la par de jugadores de la talla de Kylian Mbappé y Erling Haaland en términos de influencia ofensiva en sus respectivos equipos.
Ahora sin los numeritos
Pero más allá de las estadísticas, hay un aspecto que varios historiadores y expertos del fútbol destacan: su resiliencia. Roberto Sosa, historiador del fútbol sudamericano, apunta que «Ángel Correa ha enfrentado adversidades desde joven, incluidas complicaciones médicas que amenazaron su carrera. Pero su tenacidad y determinación le han permitido superar esos obstáculos y brillar en Europa, algo que habla de un carácter y una mentalidad similares a las de Messi».
Los comentarios de líderes políticos y gubernamentales también arrojan luz sobre la percepción de Correa en Argentina. El presidente de la nación, en una de sus declaraciones, destacó el compromiso de Correa con la selección argentina y cómo, a pesar de no ser siempre titular, siempre aporta algo positivo cuando se le requiere. Esta actitud de equipo es un sello distintivo que Messi también ha demostrado a lo largo de los años.
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Horribles comparaciones
Pero, ¿es justo comparar a Ángel Correa con Lionel Messi? Según Diego Torres, periodista deportivo de renombre, «Aunque Correa es un talento indudable y su impacto en el Atlético es evidente, todavía tiene camino por recorrer para ser considerado el sucesor de Messi. Sin embargo, su trayectoria es prometedora, y su capacidad para influir en los partidos es innegable. No debemos apresurarnos en las comparaciones, pero sí debemos reconocer el talento cuando lo vemos».
Si bien es cierto que llenar los zapatos de Messi es una tarea hercúlea, Correa ha demostrado tener el talento, el carácter y la determinación para al menos intentarlo. Con su futuro aún por delante, y con la ambición de seguir conquistando Europa y el mundo, Correa se presenta como uno de los candidatos más sólidos para continuar el legado de Messi, representando no solo a Argentina sino a toda una generación de futbolistas que sueñan con alcanzar las estrellas. Solo el tiempo dirá si realmente está destinado a ser el sucesor del gran Lionel Messi.