El Arte de la Guerra, libro atribuido al General Chino Sun Tzu, trasciende milenios y se afianza como una referencia ineludible para una audiencia que va más allá de los estrategas militares. CEO’s, ejecutivos, coaches motivacionales y, especialmente, políticos, han rescatado y aplicado sus enseñanzas. Lo que una vez se vio como tácticas para dominar el campo de batalla, ahora es una guía para navegar en el campo de juego empresarial y político. Pero, ¿qué hace que los principios de un general chino del siglo V a.C. sean tan relevantes en la política actual?
Según datos de Google Scholar, «El Arte de la Guerra» ha sido citado en más de 10.000 artículos académicos, muchos de los cuales se centran en áreas no militares, como la administración y la política. La ONU, en un estudio de 2019, observó que Sun Tzu fue mencionado en discursos diplomáticos 45% más a menudo que cualquier otro estratega.
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Sun Tzu
¿La razón? El libro de Sun Tzu no es solo sobre guerra; es sobre estrategia. En palabras del Dr. Lian Xiang, historiador en la Universidad de Beijing, «El General entendía el conflicto como una extensión de la política y la política como una extensión del carácter humano. Sus estrategias son universales porque hablan de la condición humana y de cómo enfrentamos los desafíos».
Las naciones, al igual que los ejércitos antiguos, enfrentan adversarios, ya sea en el campo diplomático, económico o ideológico. Sun Tzu escribió: «Toda guerra es una prolongación de la política por otros medios». Esta idea es resonante para los líderes de hoy, que buscan equilibrar la diplomacia con la demostración de fuerza. Como menciona el Secretario de Defensa de Francia, Gerard Delacroix, «Las lecciones de Sun Tzu me recuerdan que no debemos apresurarnos a la confrontación, sino buscar la victoria antes de que la batalla comience. En diplomacia, esto significa construir alianzas, entender al adversario y actuar con prudencia».
La estrategia sobre valorada
Además, los principios de flexibilidad, preparación y conocimiento propios y del adversario son universales. La política moderna, plagada de incertidumbre y cambio rápido, exige una adaptabilidad similar a la que Sun Tzu enseñó a sus generales. Jane McDowell, politóloga de la Universidad de Oxford, observa: «Los políticos contemporáneos enfrentan un mundo en constante cambio. Las enseñanzas de Sun Tzu, en esencia, instan a estar preparados, a ser adaptables y a comprender profundamente el terreno en el que se opera. Eso es política moderna en resumen».
Los organismos gubernamentales han acogido estas enseñanzas en sus capacitaciones. El Departamento de Estado de EE.UU., por ejemplo, ha incluido «El Arte de la Guerra» en su currículo de formación diplomática desde 1998. Según un comunicado del departamento, el libro «ofrece a nuestros diplomáticos una comprensión profunda de la naturaleza de los conflictos y cómo se pueden resolver sin recurrir a la confrontación».
Victoria sin combate
Pero quizás, el atractivo más grande de Sun Tzu en el ámbito político yace en su enfoque en la victoria sin combate. En un mundo donde las guerras pueden tener consecuencias catastróficas, la idea de ganar sin luchar es particularmente atractiva. La Dra. Mei Ling, experta en relaciones internacionales en la Universidad de Tokio, argumenta: «Sun Tzu es un recordatorio constante para nuestros líderes de que la verdadera maestría en la política y la guerra no se trata de dominar al adversario por la fuerza, sino de lograr los objetivos sin tener que pelear».
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Con el paso de los milenios, el mundo ha cambiado de maneras inimaginables desde los tiempos de Sun Tzu. Sin embargo, las luchas del poder, la influencia y la estrategia permanecen. En «El Arte de la Guerra», los políticos y líderes encuentran una brújula que, aunque antigua, apunta a verdades universales sobre la naturaleza del conflicto y la victoria. Es por eso que Sun Tzu sigue siendo, y probablemente seguirá siendo, uno de los autores más citados en el mundo de la política.