Moros, sudacas y guiris: Así recibe España a los inmigrantes

Los términos moros, sudacas y guiris son apelativos coloquiales y a menudo peyorativos utilizados en España para referirse a personas de diferentes orígenes nacionales o étnicos. La xenofobia en España es evidente. El olvido crea relaciones de poder que deja de lado, cuando golpeados por la miseria, llegaban en oleadas de barcos a las capitales de Latinoamérica en las primeras décadas del siglo XX. Hoy ya todo eso está olvidado. Ahora es al revés, Latinoamérica y otras partes del mundo que usufructuaron cuando fueron imperio, buscan sus playas por una vida mejor. Pero lejos de tener memoria lo que poseen es xenofobia.

En los últimos años, España se ha convertido en un destino atractivo para los inmigrantes que buscan nuevas oportunidades o un refugio seguro. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la población extranjera residente en España superó los 5,8 millones de personas en 2023. Este número incluye una diversidad de nacionalidades que abarca desde latinoamericanos hasta africanos, pasando por asiáticos y europeos no comunitarios.

Moros, sudacas y guiris
La xenofobia en España es un asunto incrustado en la constitución del alma del país. Ilustración MidJourney

Moros, sudacas y guiris

Aunque el país se ha beneficiado de la inmigración en diversos aspectos, como el enriquecimiento cultural y el rejuvenecimiento de una población envejecida, también ha enfrentado desafíos, uno de los más destacados es la xenofobia. Allí es donde el lenguaje deja de ser políticamente correcto para una sociedad y sin filtros categoriza a Moros, sudacas y guiris como muestra de su superioridad. Organizaciones como SOS Racismo y Amnistía Internacional han documentado actos discriminatorios y agresiones xenófobas, subrayando que la cuestión racial o étnica sigue siendo un problema en la sociedad española.

También puedes leer: Quién regula las Redes Sociales y su flujo de ofertas engañosas

Esta realidad resulta especialmente irónica dado que, en las primeras décadas del siglo XX, fueron los españoles quienes emigraron en grandes números hacia América Latina y otros destinos, huyendo de la pobreza y la inestabilidad política. Hoy en día, esa migración ha sido, en muchos casos, revertida. Según expertos en historia, como el Dr. José María Portillo Valdés, este fenómeno podría considerarse un «olvido histórico» que contribuye a las actitudes xenófobas actuales.

Los intereses de gobierno

Es difícil no percibir que desde el gobierno se estimula de soslayo la categorización de Moros, sudacas y guiris. Sin embargo, desde el ámbito gubernamental, se han realizado esfuerzos para abordar el tema. Según el Ministerio del Interior, en 2019 se incrementaron los fondos destinados a programas de integración y se actualizó el Plan Estratégico de Ciudadanía e Integración (PECI). Además, se han fomentado iniciativas como el programa «Juntos», que busca facilitar la convivencia entre población autóctona e inmigrante a través del diálogo y actividades conjuntas.

Pese a estos esfuerzos, el reto persiste. Según Amnistía Internacional, el sistema de asilo español está saturado, y muchas personas pasan meses en centros de internamiento en condiciones que no cumplen con los estándares internacionales. Además, se ha reportado un incremento en los discursos de odio en redes sociales y en algunas manifestaciones políticas. Políticos como Miquel Iceta, Ministro de Política Territorial y Función Pública, han reconocido que es necesario abordar el tema de la xenofobia y la discriminación racial de manera más efectiva.

Moros, sudacas y guiris
Muchas acciones se han emprendido para acabarla, pero es un asunto “imperial”. Ilustración MidJourney

También puedes leer: Negociar con Cuba: La liberación de Venezuela pasa por La Habana

Algunos otros datos

Los datos muestran que la diversidad en España es un hecho irreversible. Según un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), España es uno de los países europeos con mayor diversidad de origen de sus inmigrantes. Sin embargo, son conocidos en el cine, la industria del entretenimiento, o en cualquier espacio de integración social pública que califican de moros, sudacas y guiris a estos grupos étnicos cuando les apetece. La cohesión social futura dependerá en gran medida de cómo se maneje la inclusión de estas comunidades en la sociedad española.

España se enfrenta a un panorama complejo. Por un lado, es un país que ofrece una vida mejor a millones de inmigrantes; por otro, arrastra el peso de actitudes xenófobas y desafíos de integración. En este contexto, la memoria histórica y el compromiso político y social serán fundamentales para definir el carácter inclusivo o excluyente de la sociedad española en los años venideros.

 

Related articles

- Publicidad -spot_imgspot_img
spot_imgspot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí