Aquí va la gran pregunta: ¿Por qué es positivo inmigrar a EE.UU. con el parole? El tema de la migración siempre ha sido polémico en los Estados Unidos. Con el juicio sobre el programa de parole humanitario para ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela (CHNV) en marcha, presidido por el juez federal Drew B. Tipton, muchas miradas están puestas en el 27 de octubre, la fecha límite para contrarrestar argumentos finales.
La importancia de este programa para los venezolanos no puede subestimarse; es una de las pocas vías «seguras y legales» para acceder al país norteamericano. Sin embargo, algunos han optado por rutas peligrosas como cruzar el Darién, un escenario que no sólo pone en riesgo sus vidas, sino que además podría tener efectos colaterales negativos en la percepción de los venezolanos en Estados Unidos.
Inmigrar a EE.UU. con el parole
Según estadísticas del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU., los arrestos de migrantes que cruzan de forma irregular la frontera sur de Estados Unidos cayeron un 96% en los dos primeros meses de 2023. Sin embargo, el drama que viven los migrantes que intentan cruzar deja cada día episodios más oscuros que incluyen abusos, secuestros y muertes. En contraste datos de 2023 indican que en términos del proceso se han aprobado 57,000 ciudadanos de Venezuela para venir a los Estados Unidos desde octubre y además de 50,000 que ya han llegado utilizando este proceso de parole humanitario.} Es evidente que el parole es una opción que muchos encuentran más segura y confiable, tanto para ellos como para sus familias.
Tambien puedes leer: Sarrapia, cacao y crustáceos: Haga dinero exportando desde Venezuela
Organismos especializados como la ACNUR y la OIM han instado reiteradamente a los migrantes a evitar cruzar el Darién, una región selvática entre Colombia y Panamá, por sus condiciones extremadamente peligrosas. La forma más segura es inmigrar a EE.UU. con el parole. La ruta selvática, infame por la presencia de grupos armados y contrabandistas, además de las difíciles condiciones climáticas y geográficas, ha costado la vida de numerosos migrantes.
Una mancha en el gentilicio
Adicionalmente, el cruce ilegal enturbia la imagen de los venezolanos en Estados Unidos, un país ya dividido en su opinión sobre inmigración. La mejor opción es inmigrar a EE.UU. con el parole. Según el politólogo John Mearsheimer, «la forma en que un grupo de inmigrantes es percibido puede tener efectos duraderos en la política y sociedad del país de acogida». El cruce irregular pone en riesgo no sólo a quienes lo hacen, sino también la posición de aquellos que buscan acceder al país de manera legal y segura.
En el plano histórico, el análisis de estos movimientos migratorios tiene antecedentes. María González, historiadora especializada en migración latinoamericana, señala que «la percepción de un grupo de inmigrantes puede influir en la política migratoria a largo plazo. En los años 30, el flujo de inmigrantes europeos a Estados Unidos se vio severamente restringido debido en parte a percepciones negativas y prejuicios».
Revisión del impacto en el colectivo
Es crucial, entonces, considerar el impacto que las decisiones individuales pueden tener en la comunidad más amplia. El programa de parole humanitario CHNV, que se halla en un limbo judicial hasta fines de año, representa una opción más segura y legal para los migrantes. A pesar de las dificultades y retrasos que puedan surgir en el sistema judicial, las ventajas a largo plazo de optar por un camino legal y seguro son incuestionables tanto para los individuos como para la percepción general de los venezolanos en los Estados Unidos.
También puedes leer: El baño químico de Julio Fuenmayor: Online Reputation Management
El dilema ante el que se encuentran los venezolanos es entonces claro: optar por el riesgo y la incertidumbre del cruce del Darién o esperar una resolución judicial que, aunque tardía, podría proporcionar una vía más segura y aceptada para la migración. La elección de inmigrar a EE.UU. con el parole podría tener repercusiones no sólo para ellos sino también para la forma en que los venezolanos, y quizás incluso otros grupos latinoamericanos, son vistos en la sociedad estadounidense. Con suerte, el sistema legal ofrecerá una solución justa y humana para todos.
A medida que la fecha del 27 de octubre se acerca, la tensión y la incertidumbre se intensifican para los venezolanos que buscan una vida mejor en Estados Unidos. Pero esta tensión va más allá de la espera de una decisión judicial; también se trata de tomar decisiones que tendrán un impacto duradero en sus vidas y en la percepción pública de una comunidad en su conjunto. Optar por el programa de parole humanitario, si está disponible, no solo ofrece un camino más seguro y legal hacia una nueva vida, sino que también contribuye a fortalecer la imagen de los venezolanos como un grupo que se esfuerza por seguir los cauces legales y éticos. Es una elección que tiene el potencial de influir positivamente en el futuro de la política migratoria y la opinión pública, afectando generaciones por venir.
