Un 8.70% de los presidentes de los Estados Unidos han sido asesinados a balazos

El 8.70% de los presidentes de los Estados Unidos han sido asesinados a balazos mientras ocupaban el cargo. Este dato frío y contundente destaca la alarmante realidad de la violencia política en una nación que ostenta el derecho constitucional de portar armas. Los asesinatos de Abraham Lincoln en 1865 y John F. Kennedy en 1963 son momentos icónicos en la historia del país, recordados con solemnidad y tristeza. Menos conocidos, pero igualmente impactantes, fueron los asesinatos de James Garfield en 1881 y William McKinley en 1901, cada uno dejando una marca indeleble en la psique estadounidense. De los 46 presidentes que ha tenido la Unión, cuatro han sido asesinados, pero una cifra superior han recibido atentados.

Thomas Klassen, profesor de la Escuela de Política Pública y Administración de la Universidad de York en Canadá, escribió recientemente para el portal The Conversation un material titulado «Un recorrido por la larga e inquietante historia de violencia política en EE. UU.» En su artículo, Klassen detalla la persistente y preocupante realidad de los asesinatos políticos en Estados Unidos, subrayando cómo estos eventos han moldeado la historia del país. Klassen, con sus credenciales académicas y su enfoque analítico, ofrece una perspectiva clara y documentada sobre la amenaza constante que enfrentan los líderes políticos en un entorno donde las armas son fácilmente accesibles.

Presidentes asesinados a balazos

El intento de asesinato de Donald Trump, quien recientemente escapó por poco de la muerte cuando una bala le rozó la oreja derecha durante un mitin de campaña en Pensilvania, resalta el peligro inherente a la búsqueda de votos en Estados Unidos. Este incidente coloca a Trump en un inquietante club de presidentes, expresidentes y candidatos presidenciales que han sido blanco de balas. Desde el asesinato de Abraham Lincoln, que conmocionó a una nación todavía tambaleándose por la Guerra Civil, hasta el impactante asesinato de John F. Kennedy en plena Guerra Fría, los líderes estadounidenses han enfrentado la mortal amenaza de ser asesinados a balazos.

asesinados a balazos
Franklin D. Roosevelt también enfrentó un intento de asesinato en 1933, cuando un pistolero disparó cinco tiros contra su coche. Roosevelt salió ileso, pero el alcalde de Chicago, Anton Cermak, que estaba con él, resultó herido y murió días después. Ilustración MidJourney

En la era moderna, Ronald Reagan es el último presidente que ha recibido disparos. En 1981, Reagan fue gravemente herido y tuvo que ser operado de urgencia después de que John Hinckley Jr. le disparara con una pistola del calibre 22 mientras salía de un hotel en Washington. A pesar de las heridas serias, Reagan sobrevivió, demostrando la resistencia física y psicológica que ha caracterizado a muchos de los líderes de Estados Unidos. Este evento subrayó la necesidad de medidas de seguridad más estrictas, aunque la historia muestra que incluso las precauciones más rigurosas no siempre son suficientes para prevenir que los presidentes sean asesinados a balazos.

Roosevelt sobrevivió a cinco balazos

Franklin D. Roosevelt también enfrentó un intento de asesinato en 1933, cuando un pistolero disparó cinco tiros contra su coche. Roosevelt salió ileso, pero el alcalde de Chicago, Anton Cermak, que estaba con él, resultó herido y murió días después. En 1975, el presidente Gerald Ford sobrevivió a dos intentos de asesinato en el mismo mes, ambos perpetrados por mujeres. Estos incidentes, aunque no resultaron en la muerte de los presidentes, destacan la constante vulnerabilidad a la que están expuestos los líderes políticos en Estados Unidos.

Tambièn puedes leer: LVL: Oposición tiene en la abstención y movilización dos variables a resolver para ganarle a Maduro

Los candidatos presidenciales tampoco han estado exentos de la violencia. Robert F. Kennedy fue asesinado en 1968 durante su campaña presidencial, un evento que sacudió al país y puso de relieve la brutal realidad de la violencia política. George Wallace, otro candidato, fue disparado y dejado paralítico en 1972. Theodore Roosevelt, un expresidente que buscaba regresar a la Casa Blanca, fue alcanzado en el pecho por una bala en 1912, pero increíblemente, continuó su discurso de campaña con la bala aún alojada en su cuerpo. Estos incidentes refuerzan la narrativa de que la violencia armada es un peligro omnipresente para aquellos que buscan o mantienen el poder político en Estados Unidos. Asimismo, los ataques fallidos podrían elevar los asesinados a balazos en EE.UU.

Martin Luther King Jr.

La historia de los asesinados a balazos de naturaleza política en Estados Unidos no se limita a los presidentes y candidatos. Figuras significativas como Martin Luther King Jr. también han sido víctimas de balas asesinas. El asesinato de King en 1968, pocos meses antes de la muerte de Robert Kennedy, marcó un punto de inflexión en la lucha por los derechos civiles y resaltó el peligro que enfrentan los líderes carismáticos en un país donde las armas son una constante presencia. En un país con más armas que personas, no es sorprendente que los tiroteos sean el medio preferido para intentar matar a figuras políticas. El intento de asesinato de Trump, en un mitin de campaña rodeado de multitudes, es un recordatorio de que la amenaza sigue siendo real y presente.

asesinados a balazos
Theodore Roosevelt, un expresidente que buscaba regresar a la Casa Blanca, fue alcanzado en el pecho por una bala en 1912, pero increíblemente, continuó su discurso de campaña con la bala aún alojada en su cuerpo. Ilustración MidJourney.

El derecho a portar armas, garantizado por la Segunda Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, es a menudo citado como un factor clave en la facilidad con la que se pueden llevar a cabo estos ataques. Este derecho, profundamente arraigado en la cultura estadounidense, crea un entorno en el que la violencia armada puede surgir en cualquier momento. La protección presidencial, encomendada al Servicio Secreto tras el asesinato de McKinley, ha evolucionado significativamente, pero siempre existe la posibilidad de que alguien con la intención y los medios pueda superar incluso las defensas más avanzadas.

Polarización y armas disponibles

En su artículo, Thomas Klassen argumenta que la violencia política en Estados Unidos es un reflejo de las tensiones y divisiones profundas en la sociedad. La disponibilidad de armas, combinada con un discurso político a menudo inflamatorio, crea un caldo de cultivo peligroso para los líderes y candidatos. La historia de los asesinatos presidenciales y los intentos fallidos de asesinato subraya la necesidad de un enfoque equilibrado que respete los derechos constitucionales mientras se protegen las vidas de los funcionarios públicos.

Tambièn puedes leer: The Wall Street Journal opina que hubo un torpe francotirador que puede unir a la nación

La supervivencia de Trump al reciente intento de asesinato demuestra una vez más la suerte y el peligro inherente a la vida pública en Estados Unidos. La persistencia de estos ataques, a lo largo de los años, sugiere que mientras se mantenga el acceso generalizado a las armas, los presidentes y candidatos seguirán siendo vulnerables a ser asesinados a balazos. La protección adecuada y las medidas preventivas son esenciales, pero no infalibles, en un país donde el acceso a las armas es un derecho consagrado y defendido con fervor.

La trágica realidad es que los líderes políticos en Estados Unidos operan bajo una sombra constante de amenaza. La historia ha demostrado que ni la posición más alta del país ofrece inmunidad contra la violencia armada. A medida que la nación continúa su debate sobre el control de armas y la seguridad pública, los ejemplos históricos de presidentes asesinados y candidatos atacados sirven como recordatorios sombríos de los riesgos que conlleva el liderazgo en una democracia armada. La protección de los líderes y la mitigación de la violencia política seguirán siendo desafíos críticos en la búsqueda de un equilibrio entre la libertad individual y la seguridad colectiva.

Related articles

- Publicidad -spot_imgspot_img
spot_imgspot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí