Un pacto histórico por la acción climática
En la 17.ª Cumbre de los BRICS en Río de Janeiro, los líderes de Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica y países asociados aprobaron de forma unánime el “Fondo Bosques Tropicales para Siempre” (TFFF). Esta iniciativa brasileña apuesta por un novedoso modelo de financiamiento climático basado en pagos predecibles, a gran escala y por resultados para la conservación de los bosques tropicales.
¿Qué lo hace revolucionario?
El TFFF se inscribe como un mecanismo de finanzas mixtas (blended finance) que busca movilizar recursos públicos y privados con una relación de 1 a 4, según explicó la ministra Marina Silva. Se premia no solo la detención de la deforestación, sino la protección activa de los bosques mediante sistemas de verificación satelital.

Apoyo internacional y metas concretas
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El fondo aspira a generar USD 4 000 millones anuales durante su fase inicial, distribuidos según la superficie preservada.
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China y Emiratos Árabes Unidos se perfilan como los primeros inversores significativos, con señales claras de respaldo durante la cumbre.
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El objetivo es consolidarlo en la COP30 de Belém (noviembre 2025), canalizando hasta USD 1,3 billones al año para financiamiento climático de aquí a 2035.
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Implicaciones para el Sur global
Especialistas destacan que el TFFF representa un avance hacia la justicia climática: por primera vez, el Sur Global propone su propio instrumento financiero, demandando a los países ricos cumplir sus compromisos y promoviendo un modelo que reconoce el rol activo de comunidades indígenas (≥ 20 % del fondo).
¿Primer paso hacia una gobernanza climática verdaderamente inclusiva?
La declaración de Río también rechazó las políticas de “tarifas verdes”, como ajustes de carbono fronterizos, que los BRICS consideran proteccionismo disfrazado. Lula advirtió que este fondo y la reforma de la arquitectura financiera global son proyectos estratégicos para un mundo multipolar.
